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Llegando al Titicaca. A sus orillas…Copacabana. [Febrero 2011]


Si tendría que decir el lugar que más deseaba visitar en Bolivia, no podría dar una respuesta,ya que en cada uno de los elegidos encontraba algo que lo hacia único. Pero sin dudas, uno de ellos era el lago Titicaca, y solo visibilizarlo desde el bus, reforzó doblemente mis ansias de llegar allí. Finalmente era el momento de conocer el lago más alto del mundo.

Luego de algunos días recorriendo La Paz y sus alrededores, emprendimos el rumbo hacia nuestra siguiente parada, COPACABANA.

Esta vez, no nos trasladaríamos en los minibuses sino que nos dirigimos a la terminal de ómnibus de La Paz, donde tomaríamos uno.

El pasaje nos costo 25 bs, y como es habitual en las terminales, se debe pagar un adicional de 2 bs por el uso de la terminal.

El recorrido se realiza por la ruta Nacional 2, la cual se encuentra en buenas condiciones, y todo transcurre como cualquier otro viaje, hasta que unos kilómetros luego atravesar la ciudad de Batallas, finalmente a lo lejos comienza a vislumbrarse un resplandor azul, que poco a poco se va acercando, hasta que la ruta se pega al mismo… llego la hora, nos encontramos con las primeras imágenes del lago Titicaca. A partir de allí, el camino sera junto al mismo.




El Estrecho de Tiquina


El lago, se divide en dos partes, la más grande en el norte llamada Chucuito y la más pequeña en el sur llamada Huiñaymarca. Las mismas se encuentran unidas por una franja de unos 800 metros de ancho, conocido como “El estrecho de Tiquina“.

No se si a muchos le pasa lo mismo, pero al ver Copacabana en los mapas, a mi entender, se encuentra en una “Península”, y me resulta llamativo su pertenencia a Bolivia y no a Perú, ya que, si bien casi toda la frontera entre estos países es terrestre, en esta zona habiendo un lago de por medio, así como más al sur en Desaguadero separa el río, me imaginaria la frontera en el estrecho de Tiquina. Incluso para llegar a la misma, se debe atravesar este estrecho de una manera particular: En balsa.

¿Pero como, no íbamos por la ruta en ómnibus?  Si, pero la ruta se corta, y el bus se detiene ya que no hay puente. Quienes conocen, automáticamente se bajan del mismo, y quienes no, un poco perdidos, nos bajamos siguiendo al resto de la gente, allí nos indicarían que debemos comprar un pasaje en lancha para atravesar el estrecho (1,5 bs). ¿Y el bus?¿Y los bolsos?

La verdad, pensé que con el camino cortado, a cada uno nos darían nuestro bolso, nos subirían a la lancha, y del otro lado otro bus esperaría, pero no, ¡nuestro bus será atravesado en una balsa gigante!

Como recomendación, nos explicaron que no perdamos de vista nuestro ómnibus, ya que al ser bajado de la balsa, suben a la gente sin prestar mucha atención si falta algún pasajero, y siguen camino. Pero como contábamos con bastante tiempo, mientras observábamos por donde se encontraba, aprovechamos, para fotografiarnos con el monumento a MANCO KAPAC (Quien es considerado el primer gobernador Inca), así como para comprar algunos alimentos para el resto del viaje, ya que al salir temprano, nuestro desayuno había sido casi nulo. Luego, continuamos viaje.







Copacabana

Algo cambiaba en este viaje. A diferencia del resto del recorrido, y viajes anteriores. Por primera vez en mi vida me encontraría con una ciudad que combina poseer una gran masa de agua, y montañas¿Tal vez por esto mi ansiedad de llegar?

Ni bien nos bajamos del bus, nos encontraríamos con la calle 6 de agosto (de 1825, día de la independencia de Bolivia). Esta calle principal, desciende hasta encontrarse con el lago, y por supuesto, el puerto. A pesar de estar desesperado por llegar hasta el final de la misma, donde se observaba el ancla gigante, característica de la ciudad (Junto al busto de Eduardo Avaroa),decidimos buscar un hostel.

Rápidamente, sobre la misma 6 de agosto, ingresamos a uno llamado Gabriel, el cual recién estaba inaugurado. Pagamos 15 bs, nuevamente por una habitación doble, y como estaba casi vacío y era nuevo, contaba con un baño en perfectas condiciones, y agua caliente las 24 hs.

Luego de recorrer el puerto, decidimos comer en un restaurante, ya que el pago se podía realizar con tarjeta de crédito  y nos venia bien aprovechar esta ventaja. Pedimos una pizza, la mas completa del menú, (la cual por señalar solamente algunos de sus ingredientes, contaba con morrón, jamón, carne picada, aceitunas negras, tomate, queso…) que pagamos 45 bs, más 17 bs de una gaseosa de 1,5 lts. Para nuestra desgracia, una vez pedida la comida, se corta la luz en la ciudad, y la tarjeta quedaría para otra ocasión.


La Iglesia de Copacabana


Si bien no creo en ningún tipo de Dios, visitar las iglesias de ciudades o pueblos, me parece clave para poder entender parte de la historia de ese sitio, principalmente de la fundación de los mismos.

Este es el caso de la Basílica de Nuestra Señora de Copacabana, la cual se caracteriza por albergar la escultura de la “Virgen Morena” o “de la candelaria“, patrona de Bolivia, tallada hacia 1.580 por el artista indígena Francisco Yupanqui, nieto del Inca Tupac Yupanqui. Esta basílica cuenta con un estilo Moro, similar a las del sur de España, justamente, la virgen, fue tomada de una representación realizada en Santo Domingo, Sevilla.

Al llegar, distinguimos claramente dos construcciones, la Iglesia principal, y a su costado la denominada capilla abierta, donde se realizaban las ceremonias al aire libre dada la enorme cantidad de fieles que llegaban a estos lugares y porque los indígenas estaban acostumbrados a tener ceremonias religiosas al aire libre.

Dentro de la basílica principal, observamos un gran altar, en color dorado, para luego visitar el santuario de las velas, un sitio oscuro, de paredes negras, llenas de cera, donde los fieles rinden culto a la Virgen prendiendo velas.


Bienvenidos AL CALVARIO


Luego de emprender el regreso de la catedral, como continuábamos sin luz decidí visitar el pequeño pero emblemático Cerro Calvario.

Como siempre, comencé a caminar sin dirección fija, pero con rumbo al cerro, era imposible equivocarme, ya que solo dos caminos conducían hasta el pie del cerro, por lo que la avenida 16 de julio, me llevaría hasta las “puertas” del mismo.

Literalmente, el cerro da la bienvenida a sus visitantes, con un arco, que indicara el comienzo del recorrido. Mi primer impresión fue que este no mentía, y si bien el camino se encuentra correctamente marcado, siendo una ancha calle, realmente este sendero apedreado y con una notable inclinación, hacen que el camino por momentos resulten un verdadero calvario. Desde allí hasta la cima, nos encontraremos con las estaciones del Vía Crucis.

Al mismo, llegan continuamente peregrinos a realizar este camino ritual hasta la cima, principalmente en semana santa y los fin de semanas, cuentan que la tradición indica que el peregrino debe tirar una pequeña piedra en cada una de las estaciones del vía crucis. Por otro lado, en la cima del calvario se realizan una serie de tradiciones, especialmente en las fiestas, en la que los creyentes se compran casa, vehículos y dinero (miniaturas de artesanía), para luego hacerlas bendecir para que durante el año venidero se haga realidad, esta adquisición.

El cerro a la vez se divide en dos picos mellizos, uno denominado macho y otro hembra, el primero llamado San Cristobal, siendo donde se encuentra el Calvario, y otro hembra, el Santa Barbara


Al llegar a la cima, me encontré con una “bella imagen”, las siete cruces, representando los dolores de la virgen, que de noche, con mal clima y sin gente, serian dignos de una película de terror. Mi suerte me llevo a que no sea de noche, pero si un nublado que genero que el azul del lago, pronto se convirtiera en gris, y gente deje la cima casi vacía.

Por la noche, optamos por comer nuevamente en un restaurante, donde el menú del día se encontraba a 15 bs, pero nuestra idea fue ir allí a probar alguna de las tantas variedades de trucha del lago que tanto recomiendan probar. Yo no soy de comer pescado, así que solo probé,  pero mi amigo Jony explico que verdaderamente vale la pena probarla.

Gastos


Ómnibus La Paz – Copacabana: Sale desde la terminal de buses, el valor del pasaje es de 25 bs + 2 bs del uso de la terminal.

Lancha para cruzar el estrecho de Tiquina: 1,5 bs

Hostel Gabriel: Habitación doble, con electricidad y baño compartido (agua 24 hs): 15 bs por persona.


Comidas en restaurantes:

Pizza completa: 45 bs

Gaseosa de 1,5 lts: 17 bs

Lomo a la pimienta con papas y ensalada de Brocoli: 30bs

Trucha rellena con papas y ensalada de Brocoli: 30bs

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