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PAÍSES BAJOS: 15 destinos imprescindibles entre tulipanes, molinos de viento y canales

Aaaaah, tulipanes, bicicletas, canales, … ¡Nada más representativo de los Países Bajos! Pero en realidad, los Países Bajos son mucho más que esto. A continuación les dejamos 15 de los destinos imprescindibles para su primera vez en el país. A parte ser destino favorito de los jóvenes europeos que quieren divertirse y dedicarse a todo tipo de actividad de otra manera ilícita en sus países de origen, los Países Bajos cuentan con mucha historia y cultura.

Pero primero que nada, hacemos una pequeña aclaración. Si bien erróneamente muchas veces se refiere a los Países Bajos como Holanda, hay que precisar que Holanda representa solo dos de las 12 regiones en que el país se divide (Holanda Septentrional y Holanda Meridional). El término general para hablar del país por completo es Países Bajos y el gentilicio neerlandés.


1. Amsterdam

No se puede no empezar por la mundialmente famosa capital, Amsterdam. Capital europea de la diversión pero también riquísima en historia y arte, cuenta con tanto por hacer y ver que le dedicamos un artículo a parte que pueden encontrar aquí en un futuro muy próximo. No solo tiene la red de canales más grande del país, uno de los mercado de flores más importantes, y unos de los museos con más arte de Europa, sino también tiene una rica oferta de opciones para relajarse, disfrutar de la vida y divertirse. En todo sentido.


2. La Haya

Sede del gobierno y de la Corte Penal Internacional, La Haya (Den Haag en neerlandés) es también sede de más de 150 otras organizaciones internacionales. Si tienen la oportunidad de llegar en día de tour, no pueden perderse un tour del Palacio de la Paz (Vredespaleis), sede de la Corte Penal y de sus jardines. El Palacio tiene un interesante mix de estilos diferentes que lo hacen único. Igualmente interesante pero visible solo desde afuera, es el palacio Noordeinde, sede de las actividades del rey de Países Bajos. Poco lejos de esto, se puede visitar el Binnenhof, un complejo de palacios que albergan al parlamento. En estos se puede recorrer la historia más negra del país así como de las torturas ya que en este lugar se encontraba una prisión con cámara de torturas, hoy en día museo. Para un poco más de arte antiguo, no se pierdan el Museo Mauritshuis, una importante colección de obras de arte de pintores nacionales como por ejemplo la famosa “Joven con Perla” de Vermeer, nombrada la Mona Lisa del Norte. El edificio en sí mismo es una obra de arte ya que era una vez una residencia noble. Para un arte más moderno, no pierdan el Gemeentemuseum, donde hay en exposición más de 300 obras de Mondrian, entre los más famosos pintores vanguardistas.


3. Róterdam

Es el mayor puerto no solo del país sino de toda Europa y por esto mucho de lo que ver y hacer en Róterdam está conectado a este  entorno. Un ejemplo es el Museo Marítimo dedicado a la historia naval. Sí más que de agua, ustedes son de aire, no se pierdan la experiencia de subir al Euromast, un edificio de 185 metros de altura desde cuya terraza se puede admirar una impresionante vista aérea de la ciudad. No solo historia y tradiciones sino también mucha innovación en Róterdam. Esto se puede ver por ejemplo en sus casas cubiertas de Piet Blom, parte del proyecto de reconstrucción del país después de la destrucción dejada por la Segunda Guerra Mundial. Otro ejemplo de esto es el Markthal, el mercado en forma de herradura, muy decorado al interior y símbolo de la ciudad.


4. Molinos de viento de Kinderdijk-Elshout

Cerca de Róterdam y a donde se puede llegar en bicicleta, se encuentra la red de los molinos de viento de Kinderdijk-Elshout. Desde hace cientos de años, estos molinos literalmente salvan al país de hundirse bajo el nivel del agua. Esta red de 19 molinos remontan el 1700, bombean el agua y así hacen controlan y gestionan el nivel del agua holandesa. Es posiblemente el paisaje más típico y más fotografiado de los Países Bajos. Tres de los molinos albergan museos donde se puede aprender sobre su funcionamiento y su historia.


5. Utrecht

Otro punto imperdible para su visita a los Países Bajos implica perderse por los canales de Utrecht, una de las ciudades más antiguas del país. El símbolo de la ciudad es la Torre Dom, tan alta (95 metros) que se puede apreciar desde todo rincón de la ciudad y, en día de cielo despejado, ¡también de Rotterdam y Amsterdam! Se encuentra en la plaza principal de la ciudad, plaza Domplein, lugar de encuentro de los locales. En realidad, la torre es solo uno de los elementos hermosos de esta plaza. Cerca de la torre se encuentra la Catedral de San Martín y enfrente el Academiegebouw, el edificio de la universidad. Obviamente, mientras se pierden entre los canales de Utrecht, no falten de llegar al barrio de los museos.


6. Edam

Si son unos turófilos, o sea unos apasionados del queso, Edam es su lugar en el mundo. Desde la Edad Media, en esta ciudad, se tiene el Kaasmarkt, el Mercado del Queso, parte de la vida semanal de los habitantes. Hoy en día es una evocación histórica y los locales se visten con trajes históricos, incluso zócalos de madera y gorrito para las mujeres, y recrean los intercambios de formas de queso. Para más información no te pierdas la historia completa aquí. Obviamente, no pueden faltar las tiendas donde degustar y comprar el delicioso queso. Y no se sorprendan si paseando por los canales, ven algunas formas de queso también... ¡en el agua!


7. Los tulipanes de Bollenstreek


Seamos sinceros, ninguna visita a Países Bajos es completa sin visitar un campo de tulipanes. Los más extensos se encuentran y son fácilmente accesibles, en bicicleta obviamente, desde la ciudad de Haarlem, en la zona llamada Bollenstreek (literalmente la región de los bulbos). Pero no solo tulipanes, la ciudad merece también la pena de ser visitada. El famoso molino de la ciudad, el Molen de Adriaan, se remonta originalmente al 1778 aunque fue destruido varias veces por el fuego. Ahora es un interesante museo sobre los diferentes usos de los molinos de viento a parte de ser un panorama tan típico neerlandés.


8. Leiden

Ciudad natal de Rembrandt, el famoso pintor neerlandés que vivió en la primera mitad del 1600, Leiden es una joya de ciudad. Algunos de los cuadros de Rembrandt, así como de otros artistas nacionales, están expuestos en el Museum de Lakenhal. Además, la ciudad alberga la universidad más antigua del país, fundada en 1500 donde se encuentra el Jardín Botánico. Es propio en este sitio que por primera vez se introdujo el tulipán. Un lugar histórico y cultural por excelencia de los Países Bajos, sin dudas.

Leiden además cuenta con muchísimos canales, más de 80 y es la segunda ciudad en el país por red fluvial, detrás solo de Amsterdam. Y como cualquiera ciudad de este país que se respete, cuenta con un molino, el Molino de Valk. Pero este tiene una pequeña peculiaridad que lo hace único: hoy en día es el único molino aún habitado de todos Países Bajos.


9. Maastricht

Maastricht está linda por arriba y también… por abajo. Los subterráneos de la ciudad son un intrincado laberinto de grutas y pasajes, algunas que remontan a la Edad Media. Se extienden por 80 kilómetros por debajo del Monte Pedro, uno de los puntos más altos de todo el país. Usados hasta la Segunda Guerra Mundial, cuando dieron reparos a personas y obras de arte, son hoy un importante lugar de interés histórico. En la superficie de Maastricht, en vez, se puede pasear por el centro de la ciudad, plaza Vrijthof y visitar la Basílica de San Servacio, de época romana y metas de peregrinajes desde siglos para visitar la tumba del Santo.


10. Las Islas de la Frisia Occidental

Si bien las Islas de la Frisia Occidentales son 5 y todas merecen una visita, hay una que aconsejamos ver: la Isla de Texel. Esta es la más grande y tiene unas de las playas mejores de todo el país, como la Paal 15 y la 17. El paisaje es de postal, la naturaleza es exuberante y casi incontaminada por el hombre. Por todos lados hay ovejas y… focas, a las cuales se pueden ver comer desde el centro Ecomar. Imperdible la foto del famoso faro rojo, icono de la isla. No obstante sea muy por fuera de las rutas turísticas internacionales, es fácilmente accesible desde el continente gracias a su cercanía a la costa y al precio barato del barco. Las otras islas son igualmente accesibles pero hay menos pasajes y cuestan más. Además, no todas son accesibles con el auto.


11. Eindhoven

Eindhoven es llamada La Ciudad de la Luz, porque en esta ciudad nació la Philips que trajo la lámpara en las casas de millones de personas. Por cierto, se puede visitar el museo Philips donde se puede ver el primer laboratorio de la fábrica y recorrer un trozo de historia moderna ya que desde la fábrica salieron otras grandes invenciones como por ejemplo la radios, los CDs y mucho más que les dejamos descubrir en el museo. A pesar de tener tanta importancia en la historia moderna, Eindhoven tiene aún lazos con el pasado. Esto hace que haya muchísimo para visitar en la ciudad como la Iglesia de Santa Catalina y para viajar aún más atrás en el tiempo, no pierdan la oportunidad de visitar el Prehistorisch Dorp, un museo al aire libre donde se puede ver como era la Eindhoven medieval y admirar unos hallazgos de la Edad Media.


12. Zaanse Schans

Si bien Zaanse Schans no cuenta más con sus 600 molinos de vientos, hay aún unas decenas que se pueden admirar y visitar al interior. Teniendo en cuenta que el pueblo cuenta con solo 40 casas, podemos entender la gran importancia que tuvieron los molinos en el área. Hace un tiempo estos eran el centro de la producción industrial del área pero hoy es un destino más histórico y turístico. En sus molinos se puede volver atrás en el tiempo, hasta ver cómo se vivía en en el 1600 y 1700 y aprender mucho sobre cómo se producían los diferentes productos, desde productos alimentarios hasta pinturas y otros óleos.


13. Delft

Patria de las cerámicas azules de Delft, se puede aún asistir a la delicada elaboración de estas en la única fábrica de porcelanas (la única aún existentes de las más de 30 presentes en 1700): la Fábrica Real de porcelanas de Delft (De Koninklijke Porceleyne Fles). La última parte de la elaboración es la delicada decoración a mano en la típica pinta de azul, el así llamado azul de Delft. Ustedes pueden también cimentarse en la decoración de un objeto de porcelana en uno de los varios workshops. Pero Delft no es solo esto. Delft fue también la ciudad de nacimiento del Maestro de la Luz, Vermeer, quien vivió y trabajó aquí a mitad del 1600. En el Vermeer Centrum de Delft se pueden admirar las copias de las 37 obras del pintor, con tanto de detalladas explicaciones y el simbolismo que las rodean. Una ciudad que ofrece arte a 360 grados.


14. Den Bosch


Otra ciudad encantadora de Países Bajos es seguramente ‘s-Hertogenbosch, que como se dieron cuenta, no es nada fácil de pronunciar. Por esta razón, comúnmente se llama también Den Bosch. Es una ciudad medieval, ciudad natal de otro gran pintor neederlandes, Hieronymus Bosch. La ciudad merece la pena de ser visitada perdiéndose por sus callecitas. La plaza principal hospeda el mercado semanal dos veces a la semana y es el lugar perfecto para saborear un poco de la gastronomía típica de Países Bajos. La Catedral que remonta al siglo XIII es imprescindible, así como el museo Noordbrabants que alberga cuadros de Bosch y de Van Gogh entre otros. En fin, no pueden irse de Den Bosch sin antes haber degustado el Bossche Bol, literalmente traducido como la bola de chocolate, un bolón relleno de crema y cubierto en chocolate. 


15. Giethoorn

Dejamos por el final, lo que se dice que sea el pueblo más lindo de todo Países Bajos. Sin dudas, Giethoorn, es unos de los pueblos más interesantes y atípicos de todo el país ya que es totalmente sin calles. Para moverse, los habitantes, así como los turistas, usan barcos y navegan por los canales que separan las diferentes islas. Estas pequeñas islas albergan unas factorías con techo de cañas y están conectadas entre sí por más de 170 puentes de madera. Una especie de Venecia neerlandés. La razón por cómo se desarrolló esta ciudad es puramente histórica: en esta área vivían y trabajaban los colectores de turba que debido a su trabajo, crearon en el área circostante muchas pequeñas lagunas y estanques.

¿Qué otros lugares para visitar agregarían en Países Bajos? Nosotros tenemos una lista de por lo menos otros 20 lugares más. Déjanos saber los suyos en un comentario. Y como esta nota ha sido escrita por una no nativa, si notan alguna falta, dejanoslo saber también ;) Tot ziens!

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